Thursday, November 22, 2018

Thanksgiving y Blackfriday

Thanksgiving y Blackfriday.
Una proclama del presidente de los Estados Unidos, fechada en Washington el 3 de octubre de 1863, reserva el último jueves de noviembre como "día de acción de gracias y alabanza": el célebre Thanksgiving.
Contrariando la lógica según la cual el carnaval precede a la Cuaresma -el "desmadre" al ayuno-, a la fiesta de acción de gracias la sucede inmediatamente y cada vez con mayor celeridad, llegando incluso a invadirla en parte, la debacle comercial del "viernes negro": el no menos famoso Black Friday.
Pero mientras que el Thanksgiving sigue siendo exclusivo de Estados Unidos y Canadá, el Black Friday se está extendiendo por el mundo en una ola incontenible. Acosado por un impaciente Black Friday que le pisa los talones y lo expulsa ya a media tarde, el día de acción de gracias se encoge cada vez más. El Blackfriday, en cambio, extiende su dominio hasta convertirse en Black Week: una semana entera de descuentos y compras frenéticas.
¿Qué nos dice esto acerca de nosotros mismos?

6 comments:

  1. Justo estaba pensando en eso. La alegría de aquello que no se puede comprar.

    ReplyDelete
  2. Enhorabuena profesora Amalia por su blog!!! Pues esto del Blackfriday me hace pensar sobre el extremo valor que le otorgamos al "tener" más que al "ser". Hace unos días alguien posteaba una foto reveladora al respecto. Dejo aquí el enlace. Un fuerte abrazo. https://t.co/WCGjc4F7PJ

    ReplyDelete
    Replies
    1. Gracias! La foto es maravillosa. Parece en las inundaciones periódicas, por marea alta, de Venecia. Y los asiáticos son en efecto los mejores clientes de Louis Vuitton...

      Delete
  3. Para mí que Thanksgiving se encoja, mientras que el Black Friday se expande hasta llenarlo casi todo (al menos mi computador y mi teléfono), me parece que es signo de al menos dos cosas. Por una parte, de que si hay algo realmente universal en nuestro tiempo es la cultura del consumo. Thanksgiving, a diferencia de otras costumbres gringas, nunca tuvo vocación universal, en cambio la cultura del consumo sí que la tiene. Y, por otra, de que mantenemos una relación con las cosas que tiene más que ver con exigir, con pensar que todo lo que puedo comprar es por derecho mío, que con agradecer, con la conciencia de que lo bueno siempre es algo que se me da (la idea detrás del día de Acción de Gracias).



    P.D. ¿Has visto la columna de Abad Faciolince sobre el Black Friday?

    ReplyDelete
    Replies
    1. Bien visto y bien dicho.¡¿Muchas gracias! Eso me hace pensar cuál deba ser el próximo tema, de la mano de Ortega.
      Voy a mirar la columna de mi compañero de clase en el primer semestre de filosofía en Medellín.

      Delete
  4. Muy bueno. No me asusta que el consumo se expanda, sinceramente. Me preocupa que no se expanda al mismo ritmo una fiesta que tiene como centro el "agradecer". Hemos copiado casi todo lo americano en Latinoamérica, desde el Halloween al White Christmas, pero ¿por qué no esa Fiesta? Es muy sintomático. Quizás en esta época nos gusta más disfrutar de lo que "nosotros mismos hemos ganado" que de aquello por lo que tengo que dar gracias a otro. O sea, quizás no queremos tener la conciencia de que algo no ha venido de mí mismo o de mi propio esfuerzo. Yo sí creo que en esta época nos cuesta más recibir que dar, ¿o no?

    ReplyDelete